Campus Joven de la UC (CAJUCA), asociación que engloba a estudiantes progresistas de la Universidad de Cantabria, muestra su tristeza por las pretensiones del presidente del PP de eliminar el área de Educación para la Ciudadanía si gana las elecciones generales del próximo 9 de marzo. Para CAJUCA, Educación para la Ciudadanía es una asignatura que promueve valores como el respeto, la igualdad, la tolerancia, la solidaridad, la cultura de la paz, además del conocimiento de las principales normas e instituciones democráticas de nuestro país, y por tanto no se entiende como el PP quiere eliminarlas de los institutos españoles.
CAJUCA aclara que “Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos” es una materia que en nada colisiona con la moral privada ni con el derecho de los padres y madres a decidir la formación moral y religiosa que reciban sus hijos/as, uno de los argumentos esgrimidos por el PP para enfrentarse a la asignatura, ya que la materia defiende valores únicamente democráticos y constitucionales y no pretenden adoctrinar a nadie en determinadas ideologías.
Ante la confusión creada entorno a Educación para la Ciudadanía, CAJUCA recuerda que formar a los/as estudiante en la cultura de la participación y la crítica social, formar a los/as estudiante en valores por todos/as compartidos como la paz, la
Solidaridad, el respeto, la diversidad o la pluralidad, no suponen una amenaza para nadie sino todo lo contrario, pueden suponer una oportunidad de aprender a ser ciudadanos/as, personas cívicas, comprometidas con su entorno que ayuden a la cohesión social.
Esta asignatura prepara a los/as ciudadanos/as a vivir, convivir, aprender y relacionarse en sociedades cada vez más plurales, con autoestima, dignidad, libertad y responsabilidad social. Incluye habilidades relativas a la cooperación, el trabajo en equipo, la relación con los demás, la gestión y resolución de conflictos, todo ello desde la perspectiva de que relacionarse con los demás lleva implícito la aceptación de las diferencias, la tolerancia, el respecto, además del aprecio por los valores, las creencias, las culturas y la historia de los otros.
Finalmente, CAJUCA exige al Gobierno de España y a las diferentes administraciones educativas a que no den ni un solo paso atrás respecto a la asignatura y que garanticen que la materia se imparte con total normalidad en el conjunto del estado español. Asimismo, al PP y a la Conferencia Episcopal a que no intenten confundir a la opinión pública respecto a los contenidos de Educación para la Ciudadanía y que desistan en su intento de denostar esta materia.
lunes, 25 de febrero de 2008
martes, 15 de enero de 2008
RESOLUCIÓN 3º CONGRESO DE FAEST
RESOLUCIÓN 3º CONGRESO DE FAEST A FAVOR DE EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA
Desde FAEST apoyamos y creemos muy necesaria la decisión del gobierno de implantar la nueva asignatura “Educación para la Ciudadanía”, creemos que en un Estado Social y Democrático de Derecho, como es España, es motivo de normalidad que en sus aulas se enseñen los valores democráticos que nuestra constitución propugna, igualdad, libertad, tolerancia, no discriminación entre otras.
Hemos observado, como desde hace algún tiempo, ciertos sectores sociales extremadamente conservadores, desde Asociaciones de Padres, sectores de la Iglesia y algún Partido Político han cargado contra esta materia; y la verdad nos asusta, desde nuestras asociaciones progresista vemos con extrañeza como desde la más absoluta desinformación se esta intentando manipular el contenido de una asignatura que tiene como uno de sus pilares fundamentales los derechos humanos. ¿No queremos que en nuestras aulas se conozcan los derechos humanos? ¿No queremos que nuestros alumnos aprendan los valores constitucionales de la igualdad, la tolerancia, la libertad de opinión, el ejercicio de la misma? ¿Realmente que es lo que le molesta a ese sector conservador de la comunidad educativa que se niega aceptar con normalidad una asignatura que debería haber estado en las aulas y en los centros hace años?
Desde FAEST hacemos un llamamiento a la responsabilidad de todas las
Administraciones Autonómicas para aplicar la ley en esta materia, especialmente a aquellos gobiernos del Partido Popular que saben y deben saber que la ley esta para cumplirla y no cabe en esta ocasión objeción de conciencia.
Desde FAEST queremos manifestar nuestro más respetuoso rechazo a las opiniones de aquellos sectores más conservadores de la iglesia que creen que esta asignatura es totalmente incompatible con los valores católicos, vemos como un acto de cinismo absoluto la opinión que sobre esta materia se esta vertiendo por parte de éstos sectores, desde luego si alguien quiere adoctrinar a los alumnos no es desde luego la asignatura Educación para la Ciudadanía.
Instamos al resto de los sectores que forman parte de la comunidad eclesiástica a expresar sin mayor reparo alguno su distinta opinión, pues como vuelvo a manifestar muchos valores católicos y de civismo son totalmente compatibles entre sí.
Insisto, vemos con normalidad la implantación de la asignatura Educación para la Ciudadanía en nuestras aulas y respetamos las opiniones contrarias a la nuestra, pero eso sí, les pedimos que la expresen de forma constructiva, sincera, útil para la comunidad educativa y desde los principios cívicos que quizás alguno de ellos no pudo recibir cuando estudiaba.
Desde FAEST apoyamos y creemos muy necesaria la decisión del gobierno de implantar la nueva asignatura “Educación para la Ciudadanía”, creemos que en un Estado Social y Democrático de Derecho, como es España, es motivo de normalidad que en sus aulas se enseñen los valores democráticos que nuestra constitución propugna, igualdad, libertad, tolerancia, no discriminación entre otras.
Hemos observado, como desde hace algún tiempo, ciertos sectores sociales extremadamente conservadores, desde Asociaciones de Padres, sectores de la Iglesia y algún Partido Político han cargado contra esta materia; y la verdad nos asusta, desde nuestras asociaciones progresista vemos con extrañeza como desde la más absoluta desinformación se esta intentando manipular el contenido de una asignatura que tiene como uno de sus pilares fundamentales los derechos humanos. ¿No queremos que en nuestras aulas se conozcan los derechos humanos? ¿No queremos que nuestros alumnos aprendan los valores constitucionales de la igualdad, la tolerancia, la libertad de opinión, el ejercicio de la misma? ¿Realmente que es lo que le molesta a ese sector conservador de la comunidad educativa que se niega aceptar con normalidad una asignatura que debería haber estado en las aulas y en los centros hace años?
Desde FAEST hacemos un llamamiento a la responsabilidad de todas las
Administraciones Autonómicas para aplicar la ley en esta materia, especialmente a aquellos gobiernos del Partido Popular que saben y deben saber que la ley esta para cumplirla y no cabe en esta ocasión objeción de conciencia.
Desde FAEST queremos manifestar nuestro más respetuoso rechazo a las opiniones de aquellos sectores más conservadores de la iglesia que creen que esta asignatura es totalmente incompatible con los valores católicos, vemos como un acto de cinismo absoluto la opinión que sobre esta materia se esta vertiendo por parte de éstos sectores, desde luego si alguien quiere adoctrinar a los alumnos no es desde luego la asignatura Educación para la Ciudadanía.
Instamos al resto de los sectores que forman parte de la comunidad eclesiástica a expresar sin mayor reparo alguno su distinta opinión, pues como vuelvo a manifestar muchos valores católicos y de civismo son totalmente compatibles entre sí.
Insisto, vemos con normalidad la implantación de la asignatura Educación para la Ciudadanía en nuestras aulas y respetamos las opiniones contrarias a la nuestra, pero eso sí, les pedimos que la expresen de forma constructiva, sincera, útil para la comunidad educativa y desde los principios cívicos que quizás alguno de ellos no pudo recibir cuando estudiaba.
viernes, 29 de junio de 2007
MANIFIESTO DE LOS Y LAS ESTUDIANTES EN APOYO DEL ÁREA DE EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA Y LOS DERECHOS HUMANOS
Los y las estudiantes de CAJUCA y CANAE queremos mostrar nuestro apoyo al área de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos.
Para nosotros, los poderes públicos pueden y deben organizar e impartir enseñanzas que transmitan valores, derechos y deberes, que busquen la formación para la información y el conocimiento, la información para la opinión, y la opinión para la participación y el ejercicio de la crítica social.
Apoyamos la implantación de un área que enseñe y potencie los valores ciudadanos y su ejercicio práctico, y que fomente también la práctica misma de éstos en el aula, a través de la entrada de otros actores sociales, como los movimientos asociativos de diversa índole, especialmente los estudiantiles, los juveniles y los medioambientales.
En nuestra opinión, los contenidos de las asignaturas de educación para ciudadanía y los derechos humanos en nada colisionan con la moral privada de cada uno ni con el derecho de los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones, puesto que estamos hablando de unos contenidos cuyos objetivos principales son la formación democrática y cívica, el conocimiento de las principales normas e instituciones del derecho nacional e internacional, las relaciones sociales y entre personas, con contenidos sobre respeto al otro, dignidad o igualdad de género, el respeto, la tolerancia , la solidaridad, la cultura de la paz, el conocimiento de los servicios públicos y la educación para la participación entre otros.
Las organizaciones estudiantiles firmantes del presente manifiesto exigimos al Gobierno de España y a las diferentes Administraciones educativas que no cedan ante las presiones existentes por parte de ciertos sectores conservadores y de la jerarquía eclesiástica para que el área se imparta con normalidad, de acuerdo a la Ley Orgánica de educación y a los reales Decretos que la desarrollan.
Por otro lado, CAJUCA y CANAE pedimos a la Conferencia Episcopal responsabilidad ante el desarrollo de una norma legal que no busca el adoctrinamiento de nadie, sino la formación en valores democráticos en la propia escuela, entendiendo esta como una escuela de ciudadanía. Exigimos que retiren las presiones a los padres y madres, a los y las estudiantes y a los centros para que se acojan a una presunta objeción de conciencia, que es inadmisible ya que la Constitución española no recoge en ningún caso la posibilidad de objeción para un asunto como es este.
Para nosotros, los poderes públicos pueden y deben organizar e impartir enseñanzas que transmitan valores, derechos y deberes, que busquen la formación para la información y el conocimiento, la información para la opinión, y la opinión para la participación y el ejercicio de la crítica social.
Apoyamos la implantación de un área que enseñe y potencie los valores ciudadanos y su ejercicio práctico, y que fomente también la práctica misma de éstos en el aula, a través de la entrada de otros actores sociales, como los movimientos asociativos de diversa índole, especialmente los estudiantiles, los juveniles y los medioambientales.
En nuestra opinión, los contenidos de las asignaturas de educación para ciudadanía y los derechos humanos en nada colisionan con la moral privada de cada uno ni con el derecho de los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones, puesto que estamos hablando de unos contenidos cuyos objetivos principales son la formación democrática y cívica, el conocimiento de las principales normas e instituciones del derecho nacional e internacional, las relaciones sociales y entre personas, con contenidos sobre respeto al otro, dignidad o igualdad de género, el respeto, la tolerancia , la solidaridad, la cultura de la paz, el conocimiento de los servicios públicos y la educación para la participación entre otros.
Las organizaciones estudiantiles firmantes del presente manifiesto exigimos al Gobierno de España y a las diferentes Administraciones educativas que no cedan ante las presiones existentes por parte de ciertos sectores conservadores y de la jerarquía eclesiástica para que el área se imparta con normalidad, de acuerdo a la Ley Orgánica de educación y a los reales Decretos que la desarrollan.
Por otro lado, CAJUCA y CANAE pedimos a la Conferencia Episcopal responsabilidad ante el desarrollo de una norma legal que no busca el adoctrinamiento de nadie, sino la formación en valores democráticos en la propia escuela, entendiendo esta como una escuela de ciudadanía. Exigimos que retiren las presiones a los padres y madres, a los y las estudiantes y a los centros para que se acojan a una presunta objeción de conciencia, que es inadmisible ya que la Constitución española no recoge en ningún caso la posibilidad de objeción para un asunto como es este.
jueves, 7 de junio de 2007
CAJUCA EMPRENDE UNA RECOGIDA DE FIRMAS EN APOYO DEL ÁREA DE EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA Y LOS DERECHOS HUMANOS
Los estudiantes progresistas critican el intento de la Iglesia y de asociaciones católicas de manipular el desarrollo del área al promover la objeción de conciencia
Estefanía Ruiz, Presidenta de CAJUCA, ha criticado hoy a la cúpula eclesial y a asociaciones como la CONCAPA por promover la objeción de conciencia en torno al área de Educación para la ciudadanía y los Derechos Humanos, aclarando que “no se puede objetar de estudiar literatura o matemáticas, como tampoco de cursar unas asignaturas que tiene carácter obligatorio por una ley aprobada con el apoyo de una amplia mayoría de la comunidad educativa.”
Desde CAJUCA se va a poner en marcha una campaña de recogida de firmas para apoyar la puesta en marcha de las asignaturas del área de Educación para la ciudadanía, porque esta asignatura no es una imposición, sino fruto de la voluntad de la mayoría.
Según Estefanía Ruiz “CAJUCA apoyará siempre esa asignatura, porque los poderes públicos pueden y deben organizar enseñanzas que trasmitan a los estudiantes valores, derechos y deberes. Por mucho que le duela a la jerarquía católica, la iglesia no legisla, la Iglesia podrá dar su opinión, pero tendrá que asumir que los derechos de los ciudadanos los regula la sociedad a través del Estado, porque, sencillamente, la organización de la vida en común, la compartida en un espacio de convivencia bajo unas normas colectivas, pertenece a los ciudadanos democráticamente, a los ciudadanos individuales que se aglutinan en sociedad. No pertenece a Dios. La vida es de los hombres y con ella hacen lo que quieren de acuerdo a la ley que sanciona la mayoría”.
Para los estudiantes progresistas, esta área debe buscar la formación para la información y el conocimiento, la información para la opinión, y la opinión para la participación y la crítica social. Estas son las bases sobre las que se asienta una sociedad donde los ciudadanos son responsables, y tratan de trabajar en torno al diálogo, el consenso y el acuerdo.
Se hace necesario, por tanto, para CAJUCA una asignatura que enseñe y potencie los valores ciudadanos y su ejercicio práctico, y que potencie también la práctica misma de éstos en el aula, a través de la entrada de otros actores de la ciudadanía, como los movimientos asociativos de diversa índole, especialmente los movimientos estudiantiles, juveniles y medioambientales.
Desde CAJUCA se va a poner en marcha una campaña de recogida de firmas para apoyar la puesta en marcha de las asignaturas del área de Educación para la ciudadanía, porque esta asignatura no es una imposición, sino fruto de la voluntad de la mayoría.
Según Estefanía Ruiz “CAJUCA apoyará siempre esa asignatura, porque los poderes públicos pueden y deben organizar enseñanzas que trasmitan a los estudiantes valores, derechos y deberes. Por mucho que le duela a la jerarquía católica, la iglesia no legisla, la Iglesia podrá dar su opinión, pero tendrá que asumir que los derechos de los ciudadanos los regula la sociedad a través del Estado, porque, sencillamente, la organización de la vida en común, la compartida en un espacio de convivencia bajo unas normas colectivas, pertenece a los ciudadanos democráticamente, a los ciudadanos individuales que se aglutinan en sociedad. No pertenece a Dios. La vida es de los hombres y con ella hacen lo que quieren de acuerdo a la ley que sanciona la mayoría”.
Para los estudiantes progresistas, esta área debe buscar la formación para la información y el conocimiento, la información para la opinión, y la opinión para la participación y la crítica social. Estas son las bases sobre las que se asienta una sociedad donde los ciudadanos son responsables, y tratan de trabajar en torno al diálogo, el consenso y el acuerdo.
Se hace necesario, por tanto, para CAJUCA una asignatura que enseñe y potencie los valores ciudadanos y su ejercicio práctico, y que potencie también la práctica misma de éstos en el aula, a través de la entrada de otros actores de la ciudadanía, como los movimientos asociativos de diversa índole, especialmente los movimientos estudiantiles, juveniles y medioambientales.
viernes, 11 de mayo de 2007
I Encuentro de Estudiantes para el Estudio del EEES
La consejera de Educación ha inaugurado el ‘Primer Encuentro Interuniversitario de Estudiantes para el estudio y desarrollo de la implantación del Espacio Europeo de Educación Superior’
La consejera de Educación, Rosa Eva Díaz Tezanos, ha afirmado esta mañana en la Universidad de Cantabria (UC) que “Europa necesita universidades más flexibles, dinámicas y con señas de identidad propias”, para lo cual es necesario, ha añadido, “dotarlas de un amplio grado de autonomía”.
La consejera ha realizado estas declaraciones durante la inauguración del ‘I Encuentro Interuniversitario de Estudiantes para el estudio y desarrollo de la implantación del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES)’, acto que ha tenido lugar en el Aula Magna del Edificio Interfacultativo. Acompañando a la titular de Educación, han estado presentes el vicerrector de Estudiantes de la UC, Emilio Eguía; los directores generales de Universidades e Investigación y de Asuntos Europeos y Cooperación al Desarrollo, Andrés Hoyo y José Félix García Calleja, respectivamente, así como los delegados de Estudiantes de las Facultades de Educación, Alfonso Nicholls, y de Filosofía y Letras, Martín Ruiz.
Esta iniciativa, organizada por los propios estudiantes de la UC, se desarrollará en dos días (hoy y mañana) y pretende esclarecer algunos de los principales interrogantes que el alumnado universitario tiene con respecto a los acelerados cambios que producirá la convergencia en el EEES.
Díaz Tezanos, tras realizar un breve repaso sobre la trayectoria del “heterogéneo” modelo universitario nacional, ha señalado que los alumnos y las alumnas son los “principales actores” del mismo, confiando en incorporar las conclusiones que se extraigan de este e
ncuentro a la gestión diaria de la política universitaria.
Por otro lado, ha subrayado la estrecha colaboración existente entre la Consejería de Educación y la Universidad de Cantabria, trabajo conjunto que ha dado como resultado la firma del Contrato Programa 2006-2009, en el que se establece un marco específico para afrontar la implantación del EEES “en las mejores condiciones”.
Finalmente, la consejera ha felicitado a los organizadores por la iniciativa, enfatizando que la construcción del nuevo Espacio educativo requiere de la colaboración y participación de todos los sectores de la comunidad universitaria.
Por su parte, tanto Alfonso Nicholls como Martín Ruiz han manifestado que el objetivo del foro es que los estudiantes “hagamos oír nuestra voz ante esta nueva situación que se avecina, una voz que procede de la pluralidad de ideologías y posicionamientos”.
La consejera ha realizado estas declaraciones durante la inauguración del ‘I Encuentro Interuniversitario de Estudiantes para el estudio y desarrollo de la implantación del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES)’, acto que ha tenido lugar en el Aula Magna del Edificio Interfacultativo. Acompañando a la titular de Educación, han estado presentes el vicerrector de Estudiantes de la UC, Emilio Eguía; los directores generales de Universidades e Investigación y de Asuntos Europeos y Cooperación al Desarrollo, Andrés Hoyo y José Félix García Calleja, respectivamente, así como los delegados de Estudiantes de las Facultades de Educación, Alfonso Nicholls, y de Filosofía y Letras, Martín Ruiz.
Esta iniciativa, organizada por los propios estudiantes de la UC, se desarrollará en dos días (hoy y mañana) y pretende esclarecer algunos de los principales interrogantes que el alumnado universitario tiene con respecto a los acelerados cambios que producirá la convergencia en el EEES.
Díaz Tezanos, tras realizar un breve repaso sobre la trayectoria del “heterogéneo” modelo universitario nacional, ha señalado que los alumnos y las alumnas son los “principales actores” del mismo, confiando en incorporar las conclusiones que se extraigan de este e
ncuentro a la gestión diaria de la política universitaria.Por otro lado, ha subrayado la estrecha colaboración existente entre la Consejería de Educación y la Universidad de Cantabria, trabajo conjunto que ha dado como resultado la firma del Contrato Programa 2006-2009, en el que se establece un marco específico para afrontar la implantación del EEES “en las mejores condiciones”.
Finalmente, la consejera ha felicitado a los organizadores por la iniciativa, enfatizando que la construcción del nuevo Espacio educativo requiere de la colaboración y participación de todos los sectores de la comunidad universitaria.
Por su parte, tanto Alfonso Nicholls como Martín Ruiz han manifestado que el objetivo del foro es que los estudiantes “hagamos oír nuestra voz ante esta nueva situación que se avecina, una voz que procede de la pluralidad de ideologías y posicionamientos”.
miércoles, 2 de mayo de 2007
La reforma de la LOU entrará en vigor mañana, dando tres años a las universidades para adaptarse
La reforma de la Ley Orgánica de Universidades (LOU) entrará en vigor mañana, a los veinte días naturales tras su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), dando desde entonces un plazo de tres años a las universidades, tanto públicas como privadas y centros adscritos, para adaptar sus estatutos y normas de organización a la normativa aprobada el pasado 29 de marzo por el Parlamento.
Entre otras fechas, fija un período de cuatro meses para que el Ejecutivo apruebe el reglamento que establezca el nuevo sistema de acreditación nacional necesaria para acceder al cuerpo de funcionarios docentes universitarios. En ella, se valorarán los méritos y competencias de los aspirantes para garantizar la calidad en la selección de la plantilla de profesores.
De hecho, la ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera, anunció la semana pasada, tras presidir el último Pleno del Consejo de Coordinación Universitaria (CCU), su intención de presentar a finales de mayo dos desarrollos de la reforma a discusión del nuevo Consejo de Universidades. Serán los decretos del nuevo sistema de acreditación del profesorado universitario y la nueva ordenación de las enseñanzas superiores.
Además, el Gobierno tendrá que aprobar en un año los futuros estatutos del personal docente o investigador universitario y del estudiante. El primero incluirá la regulación de una estructura de carrera funcionarial basada en la obtención de méritos, así como las condiciones en las que los funcionarios universitarios podrán participar en la gestión y explotación de los resultados de su investigación.
También se fija un plazo de un año para que la nueva Conferencia General de Política Universitaria, previo informe del Consejo de Universidades, elabore un modelo referencial de costes que facilite a los poderes públicos el establecimiento de una financiación adecuada y favorezca su plena participación en el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES).
Entre las novedades de la modificada LOU, destacan la sustitución de la habilitación del profesorado por una acreditación para el funcionariado y la creación de un Estatuto del Estudiante Universitario, un Consejo para estos alumnos, un Observatorio de becas, un rediseño del Consejo de Universidades y el establecimiento de una nueva Conferencia General de Política Universitaria.
Además de artículos relativos a la promoción del deporte, el impulso para la convergencia europea, el fomento de la igualdad entre mujeres y hombres, el respaldo a la investigación, el reconocimiento de derechos y deberes de los estudiantes y el aumento de la plantilla de doctores, la reforma incorpora la transformación de la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA) en pública.
Entre otras fechas, fija un período de cuatro meses para que el Ejecutivo apruebe el reglamento que establezca el nuevo sistema de acreditación nacional necesaria para acceder al cuerpo de funcionarios docentes universitarios. En ella, se valorarán los méritos y competencias de los aspirantes para garantizar la calidad en la selección de la plantilla de profesores.
De hecho, la ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera, anunció la semana pasada, tras presidir el último Pleno del Consejo de Coordinación Universitaria (CCU), su intención de presentar a finales de mayo dos desarrollos de la reforma a discusión del nuevo Consejo de Universidades. Serán los decretos del nuevo sistema de acreditación del profesorado universitario y la nueva ordenación de las enseñanzas superiores.
Además, el Gobierno tendrá que aprobar en un año los futuros estatutos del personal docente o investigador universitario y del estudiante. El primero incluirá la regulación de una estructura de carrera funcionarial basada en la obtención de méritos, así como las condiciones en las que los funcionarios universitarios podrán participar en la gestión y explotación de los resultados de su investigación.
También se fija un plazo de un año para que la nueva Conferencia General de Política Universitaria, previo informe del Consejo de Universidades, elabore un modelo referencial de costes que facilite a los poderes públicos el establecimiento de una financiación adecuada y favorezca su plena participación en el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES).
Entre las novedades de la modificada LOU, destacan la sustitución de la habilitación del profesorado por una acreditación para el funcionariado y la creación de un Estatuto del Estudiante Universitario, un Consejo para estos alumnos, un Observatorio de becas, un rediseño del Consejo de Universidades y el establecimiento de una nueva Conferencia General de Política Universitaria.
Además de artículos relativos a la promoción del deporte, el impulso para la convergencia europea, el fomento de la igualdad entre mujeres y hombres, el respaldo a la investigación, el reconocimiento de derechos y deberes de los estudiantes y el aumento de la plantilla de doctores, la reforma incorpora la transformación de la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA) en pública.
martes, 17 de abril de 2007
Los alumnos de 1º de Bachillerato con medio curso aprobado estudiarán materias suspendidas con otras de 2º
Los alumnos de primero de Bachillerato que hayan superado más de la mitad de las materias no tendrán que repetir el curso en su totalidad sino que estudiarán las asignaturas suspendidas junto con otras de segundo, según la propuesta del Real Decreto de Bachillerato que desarrolla la Ley Orgánica de Educación (LOE), presentada hoy por el Ministerio de Educación y Ciencia (MEC). No obstante, se seguirá promocionando de curso con un máximo de dos disciplinas suspendidas.
Con esta nueva vía, los estudiantes podrán consolidar los resultados aprobados en primero e ir avanzando con otras materias de segundo curso, "introduciéndoles también en una dinámica del curso superior", explicó hoy el secretario general de Educación, Alejandro Tiana, en rueda de prensa para dar a conocer el reglamento, que se debatirá con las comunidades autónomas el próximo 24 de abril en la Comisión General de Educación. Como máximo, los alumnos tendrán cuatro años para cursar esta etapa.
De esta forma, se persigue concentrar sus esfuerzos en las materias no superadas y completar su jornada escolar con asignaturas del curso siguiente, posibilidad a la que no podrán acogerse aquellos jóvenes que aprueben "muy pocas" asignaturas. "Se trata de un estímulo para seguir avanzando en los estudios", explicó Tiana, matizando que las comunidades autónomas y los centros serán los encargados de diseñar esta fórmula según su casuística.
Con esta nueva vía, los estudiantes podrán consolidar los resultados aprobados en primero e ir avanzando con otras materias de segundo curso, "introduciéndoles también en una dinámica del curso superior", explicó hoy el secretario general de Educación, Alejandro Tiana, en rueda de prensa para dar a conocer el reglamento, que se debatirá con las comunidades autónomas el próximo 24 de abril en la Comisión General de Educación. Como máximo, los alumnos tendrán cuatro años para cursar esta etapa.
De esta forma, se persigue concentrar sus esfuerzos en las materias no superadas y completar su jornada escolar con asignaturas del curso siguiente, posibilidad a la que no podrán acogerse aquellos jóvenes que aprueben "muy pocas" asignaturas. "Se trata de un estímulo para seguir avanzando en los estudios", explicó Tiana, matizando que las comunidades autónomas y los centros serán los encargados de diseñar esta fórmula según su casuística.
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